PATRONES DE SEQUÍA EN TODA EUROPA Y A LO LARGO DE 30 AÑOS. ¿ESTAMOS PREPARADOS?

Desde hace años, innumerables informes de todo el mundo describen un aumento de mortalidad en bosques en forma de “pulsos”, es decir, incrementos localizados y que comprenden un período relativamente pequeño. ¿La causa? La sequía.

Si bien a lo largo de Europa existen estudios locales que denuncian esta problemática, se reducen generalmente a un ecosistema particular o a ciertas especies forestales y hasta hoy no pueden establecerse patrones continentales que comprendan períodos más significativos. En Nature Communications han publicado un interesante artículo titulado «Excess forest mortality is consistently linked to drought across Europe«. Algo así como: “El exceso de mortalidad en los bosques está ligado de manera indudable a la sequía a lo largo de Europa”.

Cabe comenzar con la idea del peligro que tiene la sequía en la sostenibilidad de la dehesa. Si de bosque mediterráneo se pasó por la actividad agraria a lo largo de siglos a un paraje semiárido, las sequías son para un ecosistema ya de por si seco, un agente acelerador de la desertización que debe considerarse enemigo número uno.  Este artículo viene a corroborar aquello que motiva la lucha diaria de FEDEHESA; El ritmo actual del cambio climático supone el mayor peligro para la sostenibilidad de la dehesa como ecosistema. El manejo holístico, la ganadería extensiva y la agroecología son las armas que nos permitirán mantener el ecosistema y mitigar la acción del cambio climático.

Pero vamos con el artículo:

Tras el estudio de mapas anuales creados por satélite durante 30 años (1987- 2017) y un análisis cuantitativo de la sequía y la desaparición de bosques en 35 países de Europa continental, los resultados mostraron una correlación negativa entre lo que denominaron CWB (Climatic Water Balance; la diferencia entre la suma de precipitaciones mensuales y la evapotranspiración potencial mensual), y el exceso de mortalidad de pabellones forestales (respecto a valores definidos y normalizados cuantitativamente).

Se estableció asimismo un umbral inferior de CWB, y aquellas áreas en las que coincidiesen valores por debajo de ese umbral, con un exceso de desaparición forestal se las denominó “zonas calientes”. En el siguiente mapa podemos observar los años y esas zonas calientes a lo largo de Europa.

FUENTE: NATURE

En concreto en España, la zona caliente fue observada en el año 2005. De hecho es el año más seco en la península desde que se tienen registros (1947). La precipitación media de ese año fue de 411 litros por metro cuadrado (lejos de los 613 litros de un año normal) y según distintas organizaciones agrarias la sequía ocasionó pérdidas en la agricultura española de 9.000 millones de euros. (Fuente: El país.com).

Es lógico deducir que la zona más afectada de la península (se puede apreciar en la tabla) fue la de montado y dehesa, que tardaron dos años en recuperar los niveles de estabilidad en lo que a densidad se refiere.

Debido a la disminución de los niveles de agua, la extensión de los períodos de evapotranspiración por el aumento de las temperatura y los incendios forestales, en los últimos 30 años se ha perdido medio millón de hectáreas (511,059 ha según el estudio).

Aunque el artículo no diferencia cuantitativamente la causa específica de la pérdida excesiva de superficie forestal, los resultados garantizan que se deriva de la sequía y sus consecuencias directas e indirectas. Además constatan un incremento en la frecuencia y agresividad de los períodos de sequía y por tanto de la fragilidad de los ecosistemas de árbol como la dehesa.

Hoy más que nunca es necesario desarrollar prácticas ganaderas y agrícolas que puedan mitigar esta terrible tendencia. El manejo holístico, establecer patrones de cultivo que permitan acumular agua en zonas estratégicas o la reducción de insumos en viñedo y olivar para reducir el laboreo y el desherbado serán fundamentales para afrontar el futuro de la dehesa.

FUENTES:

NATURE COMMUNICATION: 

  •  Mapa ->   https://www.nature.com/articles/s41467-020-19924-1/figures/2
  • Artículo Original -> https://www.nature.com/articles/s41467-020-19924-1?fbclid=IwAR1LlLFSG23ZZzUazDbTLz85SaLKMm-DG0SAYlPhCSlyaoW2-BpG6towxwU

EL PAÍS.COM:

  • https://elpais.com/diario/2005/09/03/sociedad/1125698405_850215.html)

Comparte la noticia